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Cultura de Castilla y León
Cultura de Castilla y León
9 de enero de 2018
4 de febrero de 2018
De lunes a viernes de 17:30 a 20:00 h. Sábados de 11h a 14h y de 17h a 20h. Domingos de 11h a 14h.
Todos los públicos.
Entrada libre
Exposición
Espacio Cultural Caja de Ávila (El Barco de Ávila)
Plaza de la Consititución, 7. C.P.: 05600 Barco de Ávila (El). Ávila.
920 340 100
Ángel Laso puede representar, con orgullo y de manera ejemplar, a esa nutrida legión de reporteros gráficos que año tras año, desde que la prensa empezó a incluir fotografías en sus páginas, han ido dejando constancia de los avatares cotidianos de nuestra Historia, hasta convertir su obra en fuente privilegiada e insustituible de la memoria colectiva.
A los quince años, su madre le dijo un día: "Vete a Salamanca y deja de destripar terrones". Y dejó su pueblo zamorano, Villamor de los Escuderos, donde había nacido el 4 de marzo de 1915, para buscar un futuro mejor.
En 1932 entró en el estudio del fotógrafo Eustaquio Almaraz, veterano fotógrafo de prensa y especializado en retratos de estudio, que le enseñó el oficio de retocador de ampliaciones, y seis meses después de empezar a trabajar hizo su primera foto de prensa: la celebración, en La Flecha, del fin de carrera de un médico; con esta primera imagen puso ya en práctica la que sería su norma fundamental a lo largo de toda su trayectoria: revelar la foto antes que nadie. Y se vino andando desde la finca para que apareciera publicada al día siguiente, algo muy poco frecuente en los criterios periodísticos de aquellos años.
Con Ángel Esteban, sobrino de su maestro Eustaquio Almaraz, creó su empresa Los Ángeles, referencia fotográfica ineludible en la prensa y en la vida social salmantinas; desde ahí, Ángel Laso cubría la corresponsalía de la Agencia Europa Press.
Para Ángel Laso, parco en palabras sobre el trabajo al que dedicó su vida desde los quince años, una buena foto periodística tiene que reflejar "el momento oportuno, y si hay ocho o diez fotógrafos contigo, tienes que luchar con ellos a codazo limpio por la mejor imagen".
La fotografía taurina que se recoge en esta muestra es quizá la que más directamente se ha beneficiado de aquella "revolución de la imagen" que supuso para los profesionales la aparición de teleobjetivos perfeccionados, junto con el afianzamiento de lo taurino como espectáculo por excelencia en la vida social española de los sesenta; en los años cuarenta Laso empezó a fotografiar toros en el campo, por encargo de los ganaderos, "jugándome el tipo con un gran angular". Poco después le fabricaron un teleobjetivo artesanal, hasta que incorporó a su Canon un modelo de pistola, con el que obtuvo la mayoría de las imágenes que ahora se exponen.
"Para conseguir buenas fotos taurinas hay que arrimarse...", dice. "Incluso ponerse de rodillas frente al toro, en medio del campo, para provocarle y que te dedique una mirada".
Ver más información de la exposición en archivo adjunto.
Esta exposición forma parte del programa itinerante Exposiciones Alacarta que promueve la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León en colaboración con diferentes instituciones de la región para recuperar y difundir el patrimonio fotográfico castellano y leonés, promocionar el arte visual, apoyar a los centros expositivos e incentivar el desarrollo de las zonas rurales.